Editorial: Algaida.
Fecha publicación: Febrero, 2013.
Precio: 29,50 €
Nº Páginas: 304
Género: Libro de fotografías
Edición: Tapa dura con sobrecuebierta.
ISBN: 978-84-9877-968-4
En Semana Santa se vive. Y nada más. La mirada se la forma más pura de vivir. No hacen falta las palabras ni los sintagmas, los verbos ni las corcheas. Mirar es escuchar el acorde del silencio. Todo es forma y color. Todo es la transparencia del aire que se cuela por los ojos. Una y otra vez. Como sino pasara el tiempo. Como si fuera posible conservar en el cofre de la ilusión la mirada del asombro, la mirada del niño. Y quien crea que todo esto puede ser una repetición que lleva al hastío, que se vaya a la playa. Entonces comprenderá que la Semana Santa es como una mujer hermosa. O como el mar. Porque uno no se cansa nunca de mirarlo.
[Información facilitada por la editorial]
Autores
Francisco Robles (Sevilla, 1963) es columnista de ABC de Sevilla y director de La Mañana de Sevilla, de COPE. En TeleSevilla dirige el programa Cómo está Sevilla, además de comentar las transmisiones de la Semana Santa. En su obra literaria hay títulos relacionados con esta fiesta y con la ciudad, como Tontos de capirote; Historia de Sevilla, junto a Álvaro Pastor Torres; Trío de capilla, con Javier Rubio y Juan Miguel Vega; Sevilla, ciudad eterna y Alcázar de Sevilla. El libro de las horas, con fotografías de Antonio del Junco; Historia de la Semana Santa sevillana, con Álvaro Pastor y Manuel J. Roldán. En el volumen Sevilla en el espejo recoge una selección de artículos publicados en ABC. En Algaida ha publicado la novela El aguador de Sevilla. Asimismo es el antólogo de Semana Santa: antología literaria. Ha obtenido el premio de artículos periodísticos Joaquín Romero Murube 2013.
José Antonio Zamora (Sevilla, 1958) ha obtenido numerosos premios en concursos nacionales de fotografía tanto de instituciones públicas como privadas, Ministerio de Cultura, Junta de Andalucía, Ayuntamiento de Málaga, Ayuntamiento de Sevilla, Kodak, etc. Es autor del cartel oficial de la Semana Santa de Sevilla de 1989. Colabora con varias agencias y multinacionales, EA Sports, Scania, Renfe, Barclays, Reebok, Liga ACB, Selección Española de Baloncesto. Ha publicado sus fotos en ABC, Diario 16, Interviú, Rutas del Mundo, Marco Polo, Don Balón, Gigantes del Basket, Marca, etc. Entre sus publicaciones destacan, Guía Oficial de Expo 92, Sevilla Universal, El Cossío, Historia Universal del Arte, De tapa en tapa por Sevilla, Guía de Sevilla, Volver a Sevilla, Sevilla Monumental, con textos de Carlos Colón. En Algaida ha publicado tres libros de autor: Momentos: Semana Santa de Sevilla, Vivencias: la Romería del Rocío y Pasiones: Semana Santa de Sevilla.
Sinopsis
En Semana Santa se vive. Y nada más. La mirada se la forma más pura de vivir. No hacen falta las palabras ni los sintagmas, los verbos ni las corcheas. Mirar es escuchar el acorde del silencio. Todo es forma y color. Todo es la transparencia del aire que se cuela por los ojos. Una y otra vez. Como sino pasara el tiempo. Como si fuera posible conservar en el cofre de la ilusión la mirada del asombro, la mirada del niño. Y quien crea que todo esto puede ser una repetición que lleva al hastío, que se vaya a la playa. Entonces comprenderá que la Semana Santa es como una mujer hermosa. O como el mar. Porque uno no se cansa nunca de mirarlo.
[Información facilitada por la editorial]
Hace mucho tiempo conocí a un matrimonio residente en Soria que aprovechaban las vacaciones de Semana Santa para venir a Sevilla cada año. La historia que me contaron de este matrimonio me dejó con una mezcla de sorpresa y orgullo. Os cuento.
Aprovechando que Jueves y Viernes Santo son días festivos, Arturo y su mujer decidieron hace muchos años conocer la Semana Santa de Sevilla, de la que tan bien le habían hablando. Llegaron aquí, se movieron por las calles de esta ciudad, descubrieron la luz que descendía de los cielos, el silencio en el tumulto al paso de alguna cofradía, la saeta que desgarra la noche en la madrugá, el sonido del rachear de los costaleros, el olor a incienso, el rezo fervoroso,... Aquello superaba con creces lo que habían imaginado.
Acabado los días festivos, volvieron a Soria pero Arturo estaba inquieto, en su interior bullían demasiadas emociones, su corazón pugnaba por revivir lo que con sus ojos había visto. Tomó una decisión. Tenía que volver, pero no lo haría como un turista más. Él necesitaba integrarse, formar parte de aquella magia, ser uno más,...
Desde entonces, y ya ha pasado más de una década, Arturo regresa cada año pero lo hace para vestir la túnica de nazareno de la Hermandad de El Cachorro. Aquel crucificado, esencia del barroco, lo dejó sin palabras. No era madera tallada lo que él veía, sino carne y sangre clavada en la cruz.
Mucho le tiene que gustar a Arturo vivir lo que siente aquí esos días porque, a los kilómetros de ida y vuelta hay que sumarle las horas que pasa en la calle haciendo la estación de penitencia (11 horas aprox.). Una auténtica paliza. Me dejó impresionada aquella historia y pensé que lo de Arturo no era capricho pasajero. Lo que fuera que sintió en aquel primer encuentro con Sevilla en su Semana de Pasión tuvo que ser de gran envergadura. De otro modo no me explico una reacción igual. Arturo cuenta a sus allegados que su casa de Soria es un anexo de la hermandad, llena de fotos y recuerdos y que a sus vecinos y amigos martiriza con multitud de historias y anécdotas de esta ciudad mariana.
Todo esto viene a cuento porque estos días atrás he tenido en las manos una nueva publicación de la editorial Algaida. Miradas de la Semana Santa de Sevilla no es un libro, es una joya de gran formato que tiene tanto valor para los creyentes como para los ateos. Textos cargados de emoción y poesía del periodista Francisco Robles y fotografías de vértigo (algunas a doble página) de José Antonio Zamora. Tanto uno como otro saben de lo que hablan. Tienen en su haber más de una publicación que ensalza la Semana Santa sevillana.
Miradas de la Semana Santa de Sevilla de Fco. Robles y J.A. Zamora. |
Aprovechando que Jueves y Viernes Santo son días festivos, Arturo y su mujer decidieron hace muchos años conocer la Semana Santa de Sevilla, de la que tan bien le habían hablando. Llegaron aquí, se movieron por las calles de esta ciudad, descubrieron la luz que descendía de los cielos, el silencio en el tumulto al paso de alguna cofradía, la saeta que desgarra la noche en la madrugá, el sonido del rachear de los costaleros, el olor a incienso, el rezo fervoroso,... Aquello superaba con creces lo que habían imaginado.
Acabado los días festivos, volvieron a Soria pero Arturo estaba inquieto, en su interior bullían demasiadas emociones, su corazón pugnaba por revivir lo que con sus ojos había visto. Tomó una decisión. Tenía que volver, pero no lo haría como un turista más. Él necesitaba integrarse, formar parte de aquella magia, ser uno más,...
Miradas de la Semana Santa de Sevilla de Fco. Robles y J.A. Zamora. |
Mucho le tiene que gustar a Arturo vivir lo que siente aquí esos días porque, a los kilómetros de ida y vuelta hay que sumarle las horas que pasa en la calle haciendo la estación de penitencia (11 horas aprox.). Una auténtica paliza. Me dejó impresionada aquella historia y pensé que lo de Arturo no era capricho pasajero. Lo que fuera que sintió en aquel primer encuentro con Sevilla en su Semana de Pasión tuvo que ser de gran envergadura. De otro modo no me explico una reacción igual. Arturo cuenta a sus allegados que su casa de Soria es un anexo de la hermandad, llena de fotos y recuerdos y que a sus vecinos y amigos martiriza con multitud de historias y anécdotas de esta ciudad mariana.
Todo esto viene a cuento porque estos días atrás he tenido en las manos una nueva publicación de la editorial Algaida. Miradas de la Semana Santa de Sevilla no es un libro, es una joya de gran formato que tiene tanto valor para los creyentes como para los ateos. Textos cargados de emoción y poesía del periodista Francisco Robles y fotografías de vértigo (algunas a doble página) de José Antonio Zamora. Tanto uno como otro saben de lo que hablan. Tienen en su haber más de una publicación que ensalza la Semana Santa sevillana.
Miradas de la Semana Santa de Sevilla de Fco. Robles y J.A. Zamora. |
Miradas de la Semana Santa de Sevilla es un libro de admiración, consulta, regocijo, exposición, consuelo, fervor,... Da igual que vivas en Logroño, en Cuenca, en Avilés, en Madrid, en Cáceres,... Lo que nos ofrece este libro es universal y gustará a todo aquel que se asome a sus páginas, ya sea desde el lado religioso como desde el pagano.
Leer este libro, pasear la mirada por sus fotografías ha sido prodigioso. Sin lugar a dudas es un libro idóneo para cualquier incondicional de la Semana Santa sevillana, y por supuesto lo es también para aquel que quiera aproximarse por primera vez a esta exaltación de emociones.
Por los quince capítulos con títulos tan atractivos como La mirada de Triana o El Gran Poder de la mirada, discurren pequeños fragmentos de texto, emociones encerradas entre palabras y referidas a las distintas hermandades de la ciudad. Luego, aquí y allá, como regalo para nuestros ojos, imágenes, instantáneas a cual más bonita en un más-difícil-todavía. No hay palabras. Si acaso, solo una. Impresionante.
Para cerrar esta entrada os dejo un vídeo. La salida de El Gran Poder de su basílica en la plaza de San Lorenzo. Sobrecogedor nazareno a cuyo paso se hace el silencio y cuyo rostro vemos en la cubierta de este libro.
Leer este libro, pasear la mirada por sus fotografías ha sido prodigioso. Sin lugar a dudas es un libro idóneo para cualquier incondicional de la Semana Santa sevillana, y por supuesto lo es también para aquel que quiera aproximarse por primera vez a esta exaltación de emociones.
Miradas de la Semana Santa de Sevilla de Fco. Robles y J.A. Zamora. |
Para cerrar esta entrada os dejo un vídeo. La salida de El Gran Poder de su basílica en la plaza de San Lorenzo. Sobrecogedor nazareno a cuyo paso se hace el silencio y cuyo rostro vemos en la cubierta de este libro.
Disponible en cualquier librería.
Agradezco a Algaida el envío del ejemplar.
Agradezco a Algaida el envío del ejemplar.