Editorial: Almuzara.
Fecha publicación: 2013.
Nº Páginas: 176
Nº Páginas: 176
Precio: 15,00 €
Género: Novela.
Edición: Rústica con solapas.
ISBN: 978-84-15828-37-2
No te quedes en la sinopsis y concédeme un ratito de tu tiempo para contarte con detalle lo que puedes encontrar en este libro.
La novela está estructurada en 34 capítulos numerados de corta extensión que unido a un estilo fresco, actual y eminentemente coloquial hacen de El asesino de la regañá un thriller cómico cuya lectura dura un suspiro. Son frecuentes el uso de coletillas y expresiones típicas de esta tierra que en ningún momento entorpecen la comprensión del texto.
[Blanco Cerrillo, famoso bar del centro de Sevilla por sus boquerones en adobo; Inés Rosales, fábrica sevillana de tortas de aceite]
A modo de clausura no un epílogo sino un prólogo compuesto por numerosos tuits de la cuenta del autor @RancioSevillano, con los que me he reído más incluso que con la propia novela.
El asesino de la regañá es una novela simpática y divertida con la que te reirás página sí y página también. Los personajes son bastante carismáticos y con sus ocurrencias te sacarán más de una sonrisa. Por otra parte no deja de ser un thriller con sus víctimas y su asesino que otorgará el punto justo de intriga para disfrutar de esta lectura.
Agradezco a la editorial Almuzara el envío del ejemplar.
Autor
Julio Muñoz Gijón es periodista, actualmente redactor jefe del canal de TV de la Federación Española de Fútbol y acompañante habitual de la Selección Española. Fue reportero en España Directo (se hizo célebre por su reportaje en el terremoto de Lorca), y en Andaluces por el mundo. Fue nombre líder de las redes sociales en Sevilla en el año 2013 a través de su twitter @RancioSevillano, que cuenta con más de 25.000 seguidores.
Sinopsis
¿Y si hubiera un serial killer de sevillanas maneras? ¿Y si mandara una nota al ABC después de cada crimen? ¿Qué pasaría si se confabulara con sus compinches en Cash Badía, alternara en El Tremendo o se hablara de él en el Garlochi? ¿Y si los sospechosos fueran caras conocidas de la Sevilla más tradicional? ¿Soportaría el presidente de uno de los equipos de fútbol de la ciudad un interrogatorio sobre un asesinato solamente con un zumo de naranja? ¿O un artista de la canción ligera? ¿Y una pareja de humoristas? ¿Y todos los demás? ¿Y si ese violento paisano asesinara... con una afilada regañá y solo a modernos que no comulgan con las esencia de la ciudad?
Ya está aquí la novela que Sevilla no quiere que leas.
[Datos facilitados por la editorial]
[Datos facilitados por la editorial]
No te quedes en la sinopsis y concédeme un ratito de tu tiempo para contarte con detalle lo que puedes encontrar en este libro.
Hace unas semanas os presentaba a Julio Muñoz Gijón y sus actuales dos novelas aquí.
Sevilla es una ciudad muy peculiar, muy anclada en sus costumbres y ferviente defensora de sus tradiciones. No todo el mundo ve con buenos ojos la incorporación de modernidades en nuestro día a día, de ahí que la población se divida, a grosso modo, entre aquellos aferrados al pasado que piensan erróneamente que como lo nuestro no hay nada mejor, mostrando un fuerte carácter provinciano, frente a aquellos otros de amplios horizontes que opinan que es conveniente avanzar y dar paso a los nuevos tiempos. Esto dicho muy a la ligera.
Pero os cuento un poco la sinopsis. A poco menos de un mes para que empiece la Semana Santa, una de las festividades más emblemáticas de esta ciudad junto con la Feria de Abril, comienzan a producirse diversos crímenes en diversos puntos de la ciudad que alarmará a los ciudadanos y a los hoteleros. La Semana Santa es de vital importancia para la salud económica de Sevilla y es normal que la población, la autoridades y los empresarios se sientan convulsionados temiendo que los acontecimientos ahuyenten al turismo.
El primer cadáver es encontrado colgando de una viga del techo de la basílica de la Macarena, vistiendo una camiseta negra sobre la que letras rojas dice: «No hay pan para tanto chorizo». Según la policía, se trata de un hippy del 15-M. La policía desconoce si se trata de un hecho aislado o estamos ante un asesino en serie. Las presiones que recibe de la ciudadanía ponen al comisario Miguel Rodríguez en jaque, de ahí que decida solicitar ayuda a Madrid, desde donde viajará el inspector Villanueva. Este último, en colaboración con el oficial Jiménez, un policía zalamero e ingenioso más interesado en coleccionar la vajilla del Real Betis Balompié que promociona el Estadio Deportivo que en los asesinatos, realizará las investigaciones necesarias para averiguar la causa del asesinato así como la identidad del asesino. Pero hete aquí que a la Jefatura de la Policía comienzan a llegar mensajes anónimos redactados mediante el uso de letras recortadas de periódicos y revistas, anunciando nuevas e inminentes muertes.
«ESTO SÓLO ACABA DE EMPEZAR, SERÁN 7 REVUELTAS, 7 LATIGAZOS. QUEDAN DEUDAS POR COBRAR».
De este modo se irán produciendo crimen a crimen, hasta un total de 7, número clave para la ciudad.
¿Y quiénes son las víctimas? Entre ellas figuran:
- un informático creador del videojuego titulado «Matanza Capillita» que consiste en ir matando nazarenos zombies.
- un chef catalán de un restaurante de vanguardia en cuya carta figuraba un gazpacho de fresa.
- un miembro de una ONG antitaurina
- una prometedora arquitecta encarga del proyecto de Las Setas y la Torre Pelli, dos estructuras arquitectónicas que no comulgan con los edificios tradicionales y antiguos de la ciudad.
- ...
[Setas de la Plz. de la Encarnación.- A ras de suelo ya me parecía horrendo pero
esta perspectiva aérea es más espantosa aún]
¿Qué tienen en común todas las víctimas? Pues que son personas que, de un modo u otro, han atentado contra la parte más clásica (o rancia) de la ciudad, ensuciando aquello que nos caracteriza, que nos hace diferentes de otras ciudades, tratando de introducir modernidades que desbancan nuestras costumbres y tradiciones.
¿Y qué tienen en común todos los asesinatos? Pues el arma homicida. Un trozo afilado de regañá que, como os expliqué en la entrada de presentación, no es más que una torta dura, fina y crujiente de pan que sirve para los mismos fines que los picos, los roscos o los colines.
A pesar de que este libro está lleno de fiambres, todo está narrado en clave de humor y hasta incluso el modus operandi del asesino provoca la risa. Las páginas de este libro están llenas de mucha guasa, como decimos aquí, de chistes y chascarrillos que versan incluso de temas tan serios como la muerte pero así somos nosotros, capaces de reírnos en la cara del mismísimo Satán si se tercia, haciendo gala de una ironía fina y derrochando ingenio. Idiosincrasia sevillana.
Muchos de los personajes que pululan por estas páginas son más que conocidos por todos, tanto dentro como fuera de Sevilla, aunque para el lector sevillano las evidencias son más claras. Os propongo un juego. A ver si sois capaces de averiguar quién o quiénes se esconden tras estos nombres.
1. José Manuel Poto: Cantante sevillano de rumbas, baladas y canción ligera, famoso por su canción "Para olvidar un amor"
2. Siempre igual: Popular grupo de sevillanas y rumbas que amenizan las fiestas flamencas aquí y allá.
3. Susy Marín Mayoral: Guapa diseñadora de moda flamenca exmujer de un famoso torero.
4. Los Gachones de Triana: Dúo de humoristas sevillanos, hermanos para más señas.
La solución al final de la reseña.
Acercándonos al final, el lector puede percibir que la trama no va a cerrar adecuadamente, dejando un vacío difícil de superar pero Julio Muñoz nos tiene reservada una sorpresa en el capítulo final que deja una puerta entreabierta hacia su segunda novela El crimen del palodú, de la que os hablaré en próximos días.
Acercándonos al final, el lector puede percibir que la trama no va a cerrar adecuadamente, dejando un vacío difícil de superar pero Julio Muñoz nos tiene reservada una sorpresa en el capítulo final que deja una puerta entreabierta hacia su segunda novela El crimen del palodú, de la que os hablaré en próximos días.
La novela está estructurada en 34 capítulos numerados de corta extensión que unido a un estilo fresco, actual y eminentemente coloquial hacen de El asesino de la regañá un thriller cómico cuya lectura dura un suspiro. Son frecuentes el uso de coletillas y expresiones típicas de esta tierra que en ningún momento entorpecen la comprensión del texto.
Diversas ilustraciones salpican la narración. Son como montajes o collages que tienen alguna relación con lo que se narra en el capítulo pertinente. A su vez, hay páginas llenas de señales circulares o bien manchas indefinidas como las que se muestran en la foto inferior, que quedan debidamente explicadas en los Agradecimientos:
«@RancioSevillano y la editorial Almuzara quieren agradecer las manchas de adobo, cortesía de Blanco Cerrillo, las de botellines, cedidas por Cruzcampo, y las migas de Inés Rosales».
[Blanco Cerrillo, famoso bar del centro de Sevilla por sus boquerones en adobo; Inés Rosales, fábrica sevillana de tortas de aceite]
A modo de clausura no un epílogo sino un prólogo compuesto por numerosos tuits de la cuenta del autor @RancioSevillano, con los que me he reído más incluso que con la propia novela.
El asesino de la regañá es una novela simpática y divertida con la que te reirás página sí y página también. Los personajes son bastante carismáticos y con sus ocurrencias te sacarán más de una sonrisa. Por otra parte no deja de ser un thriller con sus víctimas y su asesino que otorgará el punto justo de intriga para disfrutar de esta lectura.
Y antes de marcharme os cuento una historia muy curiosa que incluso en Sevilla son pocos los que la conocen y la de que se hace eco el autor en su novela.
En plena Plaza Nueva, donde se ubica el ayuntamiento de la ciudad, hay una capilla tan pequeña que pasa desapercibida entre los edificios y portales de la calle. Se trata de la Capilla de San Onofre, una capilla que permanece abierta 24 horas al día 365 días al año. En este lugar tiene lugar la adoración perpetua del Santísimo y para su celebración siempre está abierta y siempre hay alguien en el interior del lugar, incluso de madrugada. ¿Cómo se organiza esto? Pues a través de un libro de registro a la vista del público, en el que los fieles se inscriben y se comprometen a vigilar el lugar el día y durante las horas convenidas. ¿Curioso o no?
Solución:
1. José Manuel Soto.
2. Grupo Siempre Así.
3. Vicky Martín Berrocal.
4. Los Morancos.
En plena Plaza Nueva, donde se ubica el ayuntamiento de la ciudad, hay una capilla tan pequeña que pasa desapercibida entre los edificios y portales de la calle. Se trata de la Capilla de San Onofre, una capilla que permanece abierta 24 horas al día 365 días al año. En este lugar tiene lugar la adoración perpetua del Santísimo y para su celebración siempre está abierta y siempre hay alguien en el interior del lugar, incluso de madrugada. ¿Cómo se organiza esto? Pues a través de un libro de registro a la vista del público, en el que los fieles se inscriben y se comprometen a vigilar el lugar el día y durante las horas convenidas. ¿Curioso o no?
Solución:
1. José Manuel Soto.
2. Grupo Siempre Así.
3. Vicky Martín Berrocal.
4. Los Morancos.
Agradezco a la editorial Almuzara el envío del ejemplar.