Nacionalidad: EE.UU.
Director: William Wyler.
Reparto: Greer Garson, Walter Pidgeon, Christopher Severn, Teresa Wright, Richard Ney, Dame May Whitty, Henry Travers, Henry Wilcoxon, Reginald Owen, Peter Lawford, Tom Conway.
Género: Drama.
Sinopsis: Durante la II Guerra Mundial, una familia inglesa, que vive en un pequeño pueblo, logra sobrevivir a los bombardeos alemanes. La madre se encuentra al frente de la casa esperando que su hijo y su marido regresen de la guerra.
[Fuente: Filmaffinity]
Y de repente apareció la señora Miniver. Desconocía la existencia de esta película de William Wyler y por suerte surgió un día en no sé qué canal de Movistar+. Ahí me quedé plantada para ver este largometraje que, si bien tiene sus pros y sus contras para mí, ha resultado ser una delicia.
Belham es una pequeña localidad británica donde la vida transcurre feliz y dichosa.Katy es una ama de casa de clase media, madre de tres hijos - Vincent, Judy y Toby - y amante esposa de Clem Miniver. Su mayor preocupación es decidir si comprarse un sombrero o no, mientras que el marido se debate entre adquirir un nuevo coche cuyo coste puede echar abajo la economía familiar. La vida del matrimonio es de color de rosa, el amor es un huésped más del hogar y todo resulta perfecto, pero una negra sombra se cierne sobre sus cabezas y sobre toda Inglaterra. La guerra está cada vez más cerca, los alemanes avanzan...
Belham es una pequeña localidad británica donde la vida transcurre feliz y dichosa.Katy es una ama de casa de clase media, madre de tres hijos - Vincent, Judy y Toby - y amante esposa de Clem Miniver. Su mayor preocupación es decidir si comprarse un sombrero o no, mientras que el marido se debate entre adquirir un nuevo coche cuyo coste puede echar abajo la economía familiar. La vida del matrimonio es de color de rosa, el amor es un huésped más del hogar y todo resulta perfecto, pero una negra sombra se cierne sobre sus cabezas y sobre toda Inglaterra. La guerra está cada vez más cerca, los alemanes avanzan...
Vincent es un joven con las ideas claras. Su paso por Oxford le ha abierto los ojos y ahora intenta luchar contra la diferencia de clases. En su regreso al hogar familiar conoce a la señorita Beldon, nieta de lady Beldon, la gerifalte del condado, de la que inmediatamente se enamora. Sin embargo, estas ideas de cambiar el mundo y su jerarquía pasará a un segundo plano cuando Inglaterra entre en guerra y el joven se aliste en la aviación. La decisión de Vincent será un duro golpe para sus padres que entienden que el deber del muchacho es luchar por su patria.
Y llegan los alemanes. La guerra se convierte en la vecina de los Miniver.
Inicialmente la película muestra una sociedad rural que se debate entre si la rosa del ferroviario debe participar o no en la competición que organiza todos los años lady Beldon -una competición en la que ella siempre gana-, una sociedad que saca a relucir el materialismo y las diferencias de clases envuelta en una banda sonora alegre y brillante porque, en realidad, todos se llevan de maravilla. Como anécdota, resulta curioso desde nuestro ángulo advertir cómo la clase media habita en una enorme casa con jardín y cuenta con cocinera y doncella. Sin embargo, pronto las tornas cambiarán por completo. La señora Miniver es un largometraje que nos habla de la paz y de la guerra, de un mundo destruido por un conflicto bélico que asoló Europa y que llegó a los lugares más recónditos del país. Es la guerra de todos, de los militares pero también de los civiles que tienen que arrimar el hombro y cualquier ayuda es poca. Si se sospecha que un soldado alemán está oculto en los alrededores hay que darle caza, sobre todo porque trae un discurso aterrador y muy malas intenciones.
Por otra parte, creo que la película rinde homenaje a la mujer, a las esposas, a las novias y a las madres de los soldados que parten al frente de batalla. Los hombres tienen que unirse a filas mientras que ellas quedan en casa, con sus miedos, con sus angustias, intentando que la vida sea como antes para sus hijos más pequeños, a los que cuentan cuentos mientras las bombas caen a su alrededor. Ellas que quedan a la espera de sus hombres, de los valientes, que se juegan la vida luchando por la patria. Y sí, el largometraje tiene un mensaje político y propagandístico pero el momento histórico es el que era.¿De qué otra cosa y de qué otra manera se podía hablar si Europa estaba en plena guerra? Imagino que en el momento de su estreno arrancaría alguna que otra lágrima mientras el pecho se llenaba de orgullo por todos esos jóvenes que luchaban contra Alemania.
En cuanto a los personajes, hay mucho cliché. La vieja lady Beldon es una señora gruñona pero en el fondo tiene buen corazón. Lo único que le ocurre es que se siente sola. Tendremos también a esos matrimonios llenos de amor, al rebelde, a la jovencita encantadora,... pero qué importa si luego te encuentras una trama que va de menos a más. Y es que, con algunos saltos en el tiempo, la película, que es de larga extensión, avanza a un ritmo sosegado con algún que otro sobresalto, como la llamada a filas del hijo, la aparición de un personaje inesperado o la acción de la población civil que obliga a Clem Miniver a alejarse de la familia. Pensé que toda la película avanzaría en esa línea, con una ligera falta de intensidad, pero llegan los bombardeos y hay que refugiarse en los sótanos, y hay que despedirse del hijo, y una ráfaga de disparos cruzan un camino y el ritmo crece y se acelera. Confieso que hubo alguna escena angustiosa.
Con respecto a la interpretación, destacaría el papel de Greer Garson como la señora Miniver. Mirándola en pantalla me repetía lo mucho que me queda todavía por descubrir de un cine que se hacía con pocos recursos y con tantos buenos actores y actrices. Qué maravilla ver a esta mujer en su alegría y su sufrimiento, por no hablar de su belleza que nada tiene que envidiar a nombres de más relumbrón. Su trabajo no tiene fisura y fue por eso por lo que se llevó el Oscar en 1942 a la Mejor Interpretación. Pero no fue la única estatuilla que ganó la cinta. Cayeron cinco más, entre las que figuran Mejor Película y Mejor Dirección.
Me ha gustado mucho esta película. Hoy en día, puede ser que no la veamos tan buena como para llevarse el Oscar a la Mejor Película pero yo me traslado al año 1942 y pienso en todos esos países en guerra, en todos esos militares desplazados, en las familias huérfanas, en los hogares destrozados,... La señora Miniver es el retrato de una vida rasgada por la guerra con un mensaje esperanzador.