Autora
María Hesse (sevillana de adopción, 1982) se convirtió en ilustradora a la edad de seis años. Ella aún no lo sabía, pero su profesora y su madre sí. Unos buenos años después, tras acabar sus estudios de Educación Especial, agarró los lápices y se lanzó a la piscina de la ilustración de manera profesional. Ha trabajado como ilustradora para distintas editoriales, revistas y marcas comerciales, y su obra ha sido exhibida en varias exposiciones. Tras el fenómeno editorial que supuso su primer álbum ilustrado, Frida Kahlo. Una biografía, traducido en dieciséis países y ganador del Premio de la Fundación Nacional del Libro Infantil y Juvenil de Brasil, ha publicado Bowie. Una biografía, y en 2019 El placer. Su último libro es Marilyn. Una biografía. Su obra está presente en diecinueve países.
Sinopsis
Fue uno de los grandes iconos del siglo XX, el rostro más popular de todos los tiempos. De ella se enamoró el gran público, además de cineastas, escritores o el mismísimo presidente de Estados Unidos. Sin embargo, murió sola e incomprendida a los treinta y seis años. ¿Quién era verdaderamente Norma Jeane Baker? La actriz más conocida de la historia cinematográfica, el símbolo sexual de toda una época, el prototipo por excelencia de la rubia tonta ocultaban a una persona que sigue siendo una gran desconocida.
Tras hacer florecer los corazones de Frida Kahlo y de David Bowie, descubriéndonos su lado más humano, María Hesse ha hecho brotar el alma de Marilyn Monroe, una mujer que, como tantas de sus contemporáneas, hizo saltar por los aires todos los cánones y merece ser recordada, hoy más que nunca, por su talento, su sensibilidad, su inteligencia y las barreras que rompió.
[Información tomada directamente del ejemplar]
Qué agradable es empezar el año de reseñas en este espacio con un libro de María Hesse, otro más con el que esta ilustradora nos deleita, empleando sus pinceles para dar forma y color a la vida de personajes tan conocidos (o no) como Frida Kahlo o David Bowie. Le toca el turno ahora a la rubia más famosa de Hollywood, a Marilyn Monroe y, con este volumen siento que Hesse ha sabido sacar a la luz esa parte más desconocida de este icono del cine americano.
Si cerramos los ojos y pensamos en Marilyn Monroe, la mayoría de nosotros veremos a una mujer de curvas sinuosas, cabello rubio plateado, labios rojo pasión, coronados por un seductor lunar. Pensaremos también en esa escena de la película La tentación vive arriba (Billy Wilder, 1955) protagonizada junto a Tom Ewell. Y si, además, nos centramos en su personalidad, tenderemos a imaginar a una mujer superficial, con escasas neuronas, infantil e inmadura, con un físico espectacular que la transformaban en poco más que una mujer objeto. Sin embargo, eso será únicamente nuestra impresión porque, lo cierto es que Marilyn era algo más, mucho más, y eso nos lo va a descubrir Hesse en este volumen ilustrado.
En Marilyn. Una biografía, el lector tendrá la oportunidad de conocer a la verdadera Marilyn, su faceta más intimista y sus pensamientos más íntimos. Al margen de las bellísimas ilustraciones de Hesse, es ahí donde radica el auténtico valor de este libro, en desvelar esa parte más desconocida de la actriz. Por eso, la autora no se limita a relatar los hitos más importantes en su carrera, sino a profundizar en su psique. Para empezar, y en un par de páginas iniciales, vamos a encontrar un resumen brevísimo de lo que fue la vida de la actriz entre 1934, cuando contaba con ocho años, hasta 1962. A grandes pinceladas, Hesse nos narra, a través de la voz de la propia protagonista, cómo nace el mito de Marilyn, sus matrimonios, la captación por parte de la Fox, sus películas, o sus relaciones amorosas. A partir de este punto y distribuido en ocho capítulos -cada uno de ellos encabezados por el título de una película protagonizada por la actriz-, Hesse desarrolla los acontecimientos más importantes de la vida de Marilyn: las parejas de su madre, su nacimiento, las familias de acogida por las que pasó, sus tres matrimonios, sus inicios como modelo, el salto al cine, los largometrajes que protagonizó,...
De todo lo que he leído en este volumen, varias cuestiones llaman mi atención. Por ejemplo, en cierto modo, el cine siempre estuvo muy presente en su vida, desde bien pequeña e incluso, ella acostumbraba a idear personajes en su cabeza cuando era niña, a insuflarles vida e interpretarlos, como una forma de evadirse de la realidad que vivía. Pero si hay algo que sorprende considerablemente es su afición por la lectura y la escritura.
Marilyn leía a los rusos y contaba con una amplísima biblioteca, entre cuyos títulos figuraban no solo Leon Tolstói o sino también Rilke o Whitman. Incluso llegó a asistir a clases impartidas por Mijaíl Chéjov. Es más, ella misma dejaba por escrito sus pensamientos, componía versos,... Una parte de esos textos han sido rescatados por Hesse y plasmados en las páginas de este libro, acompañando a esas ilustraciones que nos muestra a una Marilyn más vulnerable, y diferenciados al emplear otra grafía.
También fue una mujer comprometida socialmente, luchó contra los prejuicios de la sociedad y se volvió una activista en pro de los derechos civiles. No era eso lo que se esperaba de ella, no interesaba que fuera alguien con criterio propio, y por eso se la estigmatizó, se la redujo a la mínima expresión, se la encasilló. Todo esto es el resultado de lo que Hesse apunta en las primeras líneas de la introducción de este volumen, que una mujer no es más que el fruto de lo que la sociedad y su contexto le permiten. Es fácil que uno se vuelva víctima de su tiempo, de sus circunstancias. Es lo que le pasó a Marilyn. No interesaba que fuera una mujer que pensara, que tuviera voz. Era mucho mejor que simplemente fuera un cuerpo y no un cerebro.
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