Quantcast
Channel: Lecturápolis
Viewing all articles
Browse latest Browse all 2537

FREDDIE MERCURY. LA BIOGRAFÍA DEFINITIVA de Lesley-Ann Jones

$
0
0

Editorial: Alianza Editorial
Fecha publicación: abril, 2012
Precio: 20,00 €
Género: biografía
Nº Páginas: 512
Encuadernación: Tapa blanda solapas
ISBN: 9788420671932
[Disponible en ePub]


Autora

Lesley-Ann Jones es una periodista inglesa especializada en música que trabaja para distintas publicaciones en Londres, Nueva York y Hollywood. A lo largo de su carrera ha seguido e informado sobre distintas giras de músicos tan sobresalientes como Paul McCartney, David Bowie, The Rolling Stones, Elton John y Queen entre otros, y ha publicado varios libros, entre los que destaca una biografía de Naomi Campbell.

Sinopsis

"¡NO QUIERO SER UNA ESTRELLA, QUIERO SER UNA LEYENDA!" 

Freddie Mercury, uno de los mayores talentos de la música pop de todos los tiempos, ha sido sin duda el más misterioso de aquellos intérpretes que llegaron a convertirse en leyenda.

Sin embargo, y a pesar de que su ilimitada creatividad e inigualable sentido del espectáculo le granjeara millones de enfervorizados seguidores en todo el mundo, muy pocos han llegado a conocer al hombre que se escondía tras el mito.

La biografía, además de relatar con detalle todos los pasos de su fascinante trayectoria como ídolo de multitudes, explora los aspectos más íntimos de su vida y se detiene en la confusa sexualidad que lo llevó a establecer fortísimos lazos con personas de ambos sexos.

[Información tomada directamente del ejemplar]



Biografías, un género que nunca me llamó especialmente la atención. Sin embargo, a medida que voy cumpliendo años me va resultando más atractivo leer sobre la vida de los demás. Será por comprobar lo mediocre de mi existencia (broma). Hasta la fecha, me he acercado a la vida de Frida Kahlo, Marilyn Monroe, Federico García Lorca, y alguno más, pero prácticamente ha sido a través de libros ilustrados. Leer una biografía en sí, pura y dura, creo que es la primera vez que lo hago.¿Y por qué esta en concreto? ¿Por qué leer sobre la vida de Freddie Mercury? La idea surgió cuando publiqué la reseña de la película Bohemian Rhapsody (puedes leerla aquí). Entre los comentarios había dos claras tendencias. Gente que, como yo, adoraba este largometraje y lo veían con regularidad. Y, por otra parte, hubo otro grupo de personas que confesaron sentirse decepcionadas con este largometraje.¿Por qué? Aludían a excesivas licencias, ausencia de ciertos episodios importantes en la vida del cantante y, sobre todo, poca fidelidad al desarrollo cronológico de los hechos. Y es verdad. Leer esta biografía de Freddie Mercury ha puesto las cosas en su sitio, he podido profundizar en su trayectoria musical, y en la personalidad de un hombre que el sida se llevó demasiado pronto. Leer esta biografía ha despertado mi curiosidad, y me he lanzado a la búsqueda de otros títulos, me he sentado a ver un documental tras otro y un concierto tras otro. Como dije en el resumen mensual que publiqué ayer, para mí que el fantasma de Freddie Mercury me ha poseído y ahora me ha entrado una ventolera «mercuriana» que no había sentido en mi vida.

Lesley-Ann Jones es la periodista que firma esta biografía. Desde los años 80 a 1992 se dedicó a hacer reportajes sobre el mundo del rock y del pop para diversos medios de comunicación, lo que le permitió tener acceso a grandes figuras como el mismo David Bowie. Era una novata, «una chica delgada y pecosa de veintitantos años a la que le encantaba el rock and roll», cuando entrevistó por primera vez a Freddie Mercury,  en las oficinas que Queen tenía en Notting Hill. Era 1984. Por entonces, la banda ya había publicado nueve o diez discos y habían salido muchas veces de gira. Freddie tenía 38 años. No sería la única vez que Jones y Mercury coincidieran.

En Freddie Mercury. La biografía definitiva, la periodista hace un recorrido total y completo por la vida personal y la trayectoria musical del cantante. Aunque el libro comienza con un capítulo introductorio que nos traslada a Montreaux (Suiza), abarca desde el nacimiento de la estrella en Zanzíbar, el 5 de septiembre de 1946, hasta su muerte y posterior incineración en Londres. 

Son muchos los datos a destacar en cada etapa de la vida de Mercury. De Zanzíbar y sus primeros años, se señala la posición social de la familia. El padre trabajaba para el gobierno y eso le permitía una posición algo desahogada. Contaban con servicio doméstico y una aya, Sabine, que atendía al pequeño Freddie, cuyo verdadero nombre era Farrokh Bulsara. Con dotes para la pintura y el dibujo, fue enviado a St. Peters, un colegio en Panchgani (India), -que todavía existe-, donde recibió una educación estricta, potenció sus habilidades creativas, aprendió a tocar el piano, y formó su primer grupo, The Hectics.

El libro señala que no fue una época fácil para Mercury. Alejado de sus padres por tantísimos kilómetros, a los que veía solo una vez al año, se sentía solo.


«...debió de provocarle un terrible trauma que le enviaran a un colegio a miles de kilómetros de distancia a tan tierna edad. Resulta imposible imaginar que Freddie no sintiera otra cosa que no fuera soledad y miedo,...».  [pág. 64]


Zanzíbar se ha convertido hoy en centro de peregrinación de sus fans, y algunas agencias de viaje organizan tours por los lugares que fueron espacios comunes de su infancia. No deja de ser paradójico que la ciudad que lo acogió en su nacimiento viva ajena a la leyenda de su ciudadano más insigne, a quien jamás se le hizo un reconocimiento. Cuando la familia tuvo que dejar aquel lugar y marchó a Londres, algunos familiares quedaron atrás. Su prima Perviz se queja a la periodista por la actitud del cantante, que renunció a su propio apellido y olvidó Zanzíbar para siempre. Ni siquiera les hizo llegar una cassette cuando se hizo famoso, le confiesa a Jones.

Revueltas políticas obligan a la familia a trasladarse a Londres.


«La familia Bulsara, y muchas otras como ella, huyeron para salvar sus vidas. Llevando consigo tan sólo unas pocas maletas, la familia de Freddie se dirigió a Inglaterra, donde unos familiares les habían ofrecido asilo. Nunca regresaron a Zanzíbar».  [pág. 74]

 

La vida cambió radicalmente para todos. Perdieron su estatus, su nivel económico, y comenzaron una nueva vida en los suburbios de una ciudad cuya climatología los recibió con frialdad y oscuridad. En esta parte, el libro se centra en los estudios de Freddie en el Ealing College of Art, donde se graduó como ilustrador, pero la música era su pasión. Vendrían diversos grupos como Ibex, Wreckage o Smile. Conoció a Brian May (guitarrista de la banda) y a Roger Taylor (batería). Aprovechó que el cantante de Smile dejó el grupo y Freddie ocupó su lugar. Fue entonces cuando se cambió el nombre de Farrokh a Freddie, y cuando nació Queen, un nombre que no gustó mucho al resto del grupo por las connotaciones homosexuales que tenía la palabra. Fue él quien diseñó el logo de la banda. 



«Su principal figura es un ave fénix con las alas desplegadas, el símbolo de la inmortalidad, que Freddie recordaba con cariño del escudo de su colegio, Sr. Peter's, en Panchgani. El logo también incorporaba el signo del zodiaco de cada uno de los miembros del grupo: dos leones por los leo, Taylor y Deacon, un cangrejo por el cáncer, May, y un par de hadas por el virgo, Mercury, rematados con un Q estilizada y una elaborada corona». [pág. 110-111]


Posteriormente, también se cambió el apellido. Esta época de tantos cambios hace pensar que Freddie estaba sufriendo una transformación, como si fuera una oruga que estuviera saliendo de su crisálida, convertida en una mariposa de hermosos colores. 

Entre las muchísimas anécdotas que se recogen en el libro, una de ellas coincide con estos años y me resulta curiosísima. Resulta que él y Roger Taylor montaron un  «diminuto puesto llamado Kasbah por el que pagaban diez libras a la semana, en Kensington Market». Al principio vendían la obra gráfica de Freddie y algunos bocetos de moda y dibujos sobre Jimmy Hendrix, al que Mercury idolatraba. «Incluso llegaron a vender la tesis de licenciatura de Freddie sobre Hendrix». Me pregunto quién la compraría. Si sabía realmente lo que se llevaba. O dónde andará porque, está claro que ese documento debe valer hoy un dineral. Pero no solo vendían dibujos sino que también se dedicaron a la compra-venta de ropa de segunda mano y llegaron a confeccionar sus propias prendas, con telas que encontraban de saldo y adornos viejos, y «que vendían a unos precios descaradamente hinchados». No fue una actividad comercial esporádica sino que la mantuvieron hasta que la música ocupó demasiado tiempo de sus vidas. Comenzaron a dar pequeños conciertos y darse a conocer en su entorno más cercano.

Queen grabó su primer disco en 1973. Unos años antes, Freddie y Mary Austen se conocieron. Este es otro de los capítulos más interesantes del libro. «Era una persona modesta, dulce y encantadora», se dice de la que parece ser fue el gran amor de su vida, y para la compuso la canción Love of My Lyfe, una preciosísima balada. Lo cierto es que, quien se fijó primero en Mary fue Brian May pero entre ellos nunca llegó a haber nada. Luego fue Freddie quien trató de conquistarla, aunque la joven le daba largas. En cualquier caso, «la atracción entre ambos fue inmediata, mutua y duraría toda una vida». Se cuenta en el libro que tenían muchas cosas en común. Ambos eran muy sensibles, reservados y profundos. Enseguida congeniaron y comenzaron una relación que duró seis años. De la lectura de esta biografía se deducen dos cosas. Una, que Mary lo fue todo para Freddie. Lo dijo el cantante en muchas entrevistas, que ella era el refugio al que acudía cuando las cosas se ponían serias. Y dos, que Mary estaba tan volcada en él que hasta se olvidaba de sí misma. Aunque rehízo su vida, y tuvo dos hijos, mientras Freddie vivió, ella estuvo muy pendiente del cantante hasta un punto que a mí me ha llegado a parecer una relación desigual y de dependencia. Una de las fuentes de Jones dice: 


«Ella estaba a su disposición en cualquier momento, cada día, y para ello era capaz de dejar de lado su propia vida. Donde iba él, iba ella. Casi nunca se separaba de su lado. No es de extrañar que él le tuviera devoción». [pág. 120]

 

Si lees otras declaraciones te encuentras más de lo mismo. Fue a ella a quien dejó en herencia su casa y la mayor parte de su fortuna. Luego, en documentales he escuchado a personas del entorno más cercano de Freddie, su novio Jim Hutton, por ejemplo, decir que las cosas se pusieron un poco serias con Mary, tras la muerte del cantante. En este libro, la periodista afirma que Mary se ha negado siempre a comentar los aspectos más prosaicos de su vida en común con Freddie. Imagino que se referirá a detalles íntimos porque a ella la hemos visto en entrevistas y documentales. Por ejemplo, es ella misma la que relata esa mítica escena que recoge la película Bohemian Rhapsody, cuando el cantante reconoce, primero su bisexualidad, y luego su homosexualidad.




Su tendencia sexual fue algo que le marcó y que le costó reconocer. Mercury procedía de una familia que practicaba el zoroastrismo. Eran parsis y, según se recoge en este libro, «para los parsis, la homosexualidad no sólo es pecaminosa, sino, incomprensible, una forma de culto al diablo». Este volumen hace especial hincapié en su vida sexual. Menciona aquellos primeros amantes que tuvo el artista, algunas relaciones complicadas, las fiestas que organizó cuando ya era una estrella y en las que se veía de todo, los tríos en los que participaba y su relación-amistad con Barbara Valentín, un nombre que para mí ha sido una novedad porque nunca había escuchado hablar de ella. Valentín y Austen no se podían ni ver. Bueno, del libro se desprende que era Mary quien no podía ver a Barbara y es que hubo bastante gente que no supuso una buena influencia para Freddie, ni en lo personal ni en lo profesional. Ahí andan John Reid y Paul Prenter, que se dedicaban a dirigir la trayectoria artística de Queen, y a llenarse bien los bolsillos.

Pero si de amores hay que hablar, el libro recoge un capítulo dedicado a Jim Hutton, el que fue su última pareja y el que lo vio morir. En Bohemian Rhapsody, Hutton hace de camarero y no es verdad. Jim era peluquero en el hotel Savoy. Fallecido en 2010, se habla de cómo se conocieron, se fueron a vivir juntos y construyeron un camino de apoyo y comprensión, ayudados por todos los gatos del cantante. Jim fue de lo mejor que pasó por la vida de Freddie. Y otro Jim -Jim Beach- también veló por los intereses de la banda. Era el principal socio en asuntos musicales del bufete de abogados Hartbotlle and Lewis, que en 1978 se convirtió en manager de Queen, y que no se apartó del grupo hasta el final. Fue él quien negoció la participación del grupo en el Live Aid.La actuación de Queen en este fabuloso concierto es uno de los primeros capítulos del libro y es que aquella tarde del 13 de julio de 1985, marcó un antes y un después. 

Lo bueno de este libro es que no se centra únicamente en Freddie Mercury y su grupo de rock, sino que también hace un retrato del panorama musical de cada época, y de cómo fue evolucionando la música en el mundo. Sobre el capítulo de Live Aid, Jones nos narra cómo se gestó aquel macro-concierto, que congregó a un montón de grupos y solistas, y fue retransmitido por televisión. De hecho, no recordaba que, mientras los cantantes británicos actuaban en el estadio de Wembley, los americanos, con el lógico desfase horario, lo hacían en el estadio J. F. Kennedy (Filadelfia). Y otra anécdota curiosa que recoge el libro es la siguiente: Phil Collins tocó tanto en Wembley como en Filadelfia, por cortesía del Concorde. Es decir, que cuando acabó de actuar en Reino Unido, cogió un avión y se plantó en Estados Unidos, se subió al escenario del J.F. Kennedy y cantó Against All Odds (Take a Look at Me Now). Bueno, pues este libro cuenta que, antes de organizar aquel concierto, un montón de músicos británicos formaron la Band Aid (Paul Young, Simon Le Bon, Bono, George Michael, Sting, David Bowie, Boy George, Paul McCartney y otros muchísimos más) y grabaron Do They know It's Christmas?, que fue como el We are the World británico.

Son muchos los testimonios que hablan de la actuación de Queen en aquel concierto. Dicen que ningún otro grupo tocó como ellos. «De las 704 actuaciones de Queen con Freddie al frente, aquella sigue siendo la más emblemática, su punto álgido. Live Aid le brindó al grupo la oportunidad perfecta para demostrar que, aun sin atrezzo ni parafernalia, sin sus propios equipos de iluminación y sonido, sin niebla, ni humo, ni demás efectos especiales, sin contar siquiera la magia natural del crepúsculo, y con menos de veinte minutos para demostrar su valía, Queen fue el soberano indiscutible que seguía teniendo lo que hay que tener para hacer bailar al mundo»Peter «Phoebe» Freestone, el ayudante personal de Freddie dice que Queen ensayó muy en serio en el teatro Shaw de Londres, en la calle Euston, durante una semana entera, mientras que otros grupos simplemente llegaron y tocaron sin más. Por cierto, que Freestone, al que tanto recurren en documentales, ni asoma por la película dirigida por Bryan Singer. Phoebe tiene una página web (aquí), con un montón de material sobre el cantante y donde puedes dejarle las dudas y preguntas que tengas sobre Mercury (aunque no sé si la página sigue teniendo actividad).

Este capítulo también es muy interesante de leer porque no solo habla de la actuación de Queen sino de la del resto de participantes, con curiosidades y anécdotas divertidas. 

Pero, ¿cómo era realmente Freddie Mercury? Estas dos citas me parecen muy significativas:


«Allí arriba, en el escenario, era tan gigantesco que uno esperaba que fuera imponente también en la vida real. No lo era. Al contrario, parecía bastante pequeño y encantadoramente pueril». [pág. 13]

    
«Podía ser tan humilde y poco pretencioso fuera del escenario como arrogante sobre él». [pág. 14] 


En conversación con algún familiar hablan de él como un niño tímido y reservado, que apenas hablaba de pequeño, y que se crecía en el escenario, como si se convirtiera en otra persona. Sus amigos inciden en que cuidaba mucho su aspecto, que se podía llevar horas y horas arreglándose y cuidando su atuendo. «Freddie era un showman extravagante en una época en la que los grupos salían al escenario vestidos con la misma ropa que habían llevado todo el día»En la contraportada del libro se recogen unas sorprendentes declaraciones que él mismo hizo cuando la fama lo había ya desbordado.


«He creado un monstruo. El monstruo soy yo. No puedo echarle la culpa a nadie más. Es por lo que llevo trabajando desde que era niño. Habría matado por conseguir esto. Me ocurra lo que me ocurra, es todo culpa mía. Es lo que yo quería. Es lo que todos nos esforzamos por alcanzar. Éxito, fama, dinero, sexo, drogas, lo que uno quiera. Yo puedo tenerlo. Pero ahora estoy empezando a darme cuenta de que, de la misma forma que lo he creado, también quiero huir de ello. Empieza a preocuparme el hecho de que no puedo controlarlo, y que en realidad, eso me controla a mí».[pág. 16]


Decía que subirse a un escenario era como una experiencia extracorporal, que se convertía en otra persona distinta a la que era después de acabar un concierto. La gente lo paraba por la calle y esperaba encontrarse en cualquier bar con el mismo personaje que abducía al público desde el escenario. «Yo no soy ese, soy una persona más tranquila. Intento separar mi vida privada del intérprete público, porque es una existencia esquizofrénica. Supongo que ése es el precio que tengo que pagar. No me malinterpretéis, no soy un pobrecito millonario. La música es lo que hace que me levante por la mañana. Tengo verdaderamente muchísima suerte». Llegó un momento en el que ser una estrella se convirtió en algo insoportable. Tenía acceso a todo lo mejor, el mundo a sus pies, ganó muchísimo dinero, viajó, se compró casas pero luego, si acudía a un restaurante a comer, cada poco tiempo aparecía un fan y eso le incordiaba. Tampoco le gustaba conceder entrevistas. Pero encontró un refugio en Montreux (Suiza). A los pies del lago Leman, donde se puede contemplar una escultura de Mercury, encontraba la privacidad y la tranquilidad que  necesitaba. 




Freddie Mercury. La biografía definitiva nos habla del hombre y el cantante, de lo que ocurrió en su vida y de lo que ocasionó su música. La trayectoria de Queen no estuvo exenta de polémica. El vídeo I Want to Break Free«remotamente inspirado en una escena doméstica del culebrón de la televisión británica Coronation Street», fue muy popular en Reino Unido pero en la conservadora América, al verlos vestidos de mujer, se sintieron ofendidos y provocó el enfado de muchos fans. Por otra parte, muchos de sus conciertos fueron un auténtico  caos, no solo por los lugares en los que actuaron, sino también por algunos contratiempos que se relatan en este libro, como la gangrena que sufrió Brian May en el viaje promocional a Australia. Y más allá de esto, también hace un repaso a las colaboraciones con Michael Jackson o al momento en el que conoció a Montserrat Caballé y nació el disco Barcelona

Con una compleja relación con la prensa y los críticos, que a veces los vapuleaba a pesar de los éxitos, llegó el momento sida y se formó un auténtico revuelo mediático. Los rumores corrieron como la pólvora cuando Freddie se retiró un poco de la vida pública e hizo algunas apariciones en las que se le veía especialmente demacrado. En la grabación del vídeo These are the days of our lives ya estaba muy mal.  ¿Cómo se contagió Freddie de VIH? ¿Cuál de sus amantes le traspasó ese regalo envenenado? En el libro se habla bastante de este asunto. Incluso se señala un pub inglés que parece que fue el lugar desde el que se extendió el sida por Reino Unido. Pero antes de conocer su enfermedad, Jones cuenta que el cantante dijo: «Simplemente arrojad al lago mis restos cuando yo muera». Si las aguas del Leman acogieron las cenizas del cantante tras su muerte, el 24 de noviembre de 1991, solo los más cercanos lo saben.

Freddie Mercury tuvo una vida breve pero muy intensa. Se le podría achacar muchos excesos pero la vivió como quiso y, seguramente, la disfrutó aún más. Lo que está claro es que dejó un legado musical incuestionable y fue un artista que revolucionó la forma de hacer música, mezclando géneros. Del hombre, del artista, de la música, del amor, de las relaciones entre los miembros, de los éxitos y los fracasos de Queen, de todo esto se habla en este libro. Como también de la impresionante actuación con el Royal Ballet en el Coliseum de Londres, el 7 de octubre de 1979. Lástima la mala calidad de los vídeos que se encuentran en YouTube.




Lesley-Ann Jones hace un trabajo inmenso en esta biografía, reuniendo un montón de testimonios y documentos gráficos. Si hasta incluso se desplazó a Zanzíbar para conseguir la partida de nacimiento del cantante, pero allí se encontró con un curioso inconveniente que ella misma relata entre estas páginas.

Todo esto que os he contado es solo una décima parte de lo que puedes encontrar en este libro. Las más de quinientas páginas de este volumen están llenas de datos, curiosidades y anécdotas.¡Y fotos! Casi una veintena de páginas llenas y llenas de fotos. También cuenta con varios anexos: cronología (que llega al año 2011 porque Queen ha seguido en activo, tras la muerte de Freddie), discografía y un índice analítico. 

Me ha gustado mucho, muchísimo leer este libro. Hay grupos que nacen y al poco tiempo mueren. Algunos perduran en el tiempo pero sus componentes van cambiando. En el caso de Queen, Freddie Mercury, Brian May, Roger Taylor y John Deacon estuvieron juntos desde febrero de 1971 al 9 de agosto de 1986, fecha en la que dieron su último conciertoen la localidad de Stevenage, al norte de LondresSaber más sobre Freddie Mercury, como persona y como artista, me ha empujado a seguir buscando más información. Me parece que tuvo una vida con muchos claroscuros pero muy rica musicalmente. 

Sé que este libro no es para todo el mundo. Está especialmente dirigido a los fans del cantante pero, como dije antes, también habla de la música en general y aborda también detalles de otros artistas del momento. Así que si te gusta la música, si te gusta el rock & roll, aunque no seas fan de Queen, creo que este libro te va a hacer disfrutar. Es muy muy completo, y muy interesante. Yo lo he devorado y me han entrado ganas de seguir leyendo biografías.

Por cierto, si como yo te has preguntado alguna vez por qué Mercury cogía el micrófono de esa forma tan singular, Jones lo explica en su libro:


«Siempre que Freddie salía  a cantar, hacia girar su micrófono como el bastón de una majorette. Aquel micrófono iba montado en un aparatoso y pesado pie. En un momento dado, Freddie agarró el micrófono e intentó balancearlo, pero la parte de abajo se le desprendió y cayó al suelo. Impertérrito, Freddie siguió con la parte de arriba. Acababa de nacer una marca de la casa».


Y si te interesa, ahí os dejo algunos vídeos, documentales y conciertos que llevo vistos hasta ahora. Hay muchos más.

* Entrevista a Lesley-Ann Jones tras la publicación del libro (aquí).

* Documental The Great Pretender (aquí).

* Documental El espectáculo debe continuar (aquí).

* Documental Days of our life (aquí)

* Documental Freddie Mercury. La historia jamás contada (aquí).

* Concierto Hungarian Rhapsody - Live in Budapest , 1986 (aquí)

* Concierto Homenaje a Freddie Mercury - Abril 1992 (aquí)

[Fuente: Imagen de la cubierta tomada de la web de la editorial]

Puedes adquirirlo aquí:


Viewing all articles
Browse latest Browse all 2537

Trending Articles