Año: 1963.
Nacionalidad: EE.UU.
Director: Francis Ford Coppola.
Reparto: William Campbell, Luana Anders, Bart Patton, Mary Mitchell, Patrick Magee, Eithne Dunn.
Género: Terror.
Sinopsis: Cuando John Halloran muere de un infarto, su esposa teme no cobrar la herencia. Escribe entonces una carta al resto de la familia anunciando que John ha tenido que viajar a Nueva York por negocios. Cuando se traslada a la casa familiar buscando un modo de quedarse con el dinero, descubre que la familia celebra un morboso ritual...
[Información facilitada por Filmaffinity]
Los que visitáis este espacio con frecuencia sabéis, por un lado, de mi pasión por el cine en blanco y negro y por otro, de mi afición por las películas de terror. Pues bien, hoy traigo una combinación de ambos aunque catalogar este largometraje como película de terror es excesivo.
Hace unos años, y gracias a una promoción de un periódico, me hice con una suntuosa colección de películas titulada Joyas del cine, cuarenta y seis dvds que contienen tres películas cada uno. Entre ellas hay filmes tan conocidos como El hombre que sabía demasiado, El maquinista de la general,... Películas de distintos géneros. Pero también hay otras de las que jamás había oído hablar. Es el caso de Demencia 13, uno de los primeros largometrajes de los muchos que posteriormente dirigió Francis Ford Coppola.
Como la sinopsis que recoge Filmaffinity no es muy acertada, paso a comentaros brevemente el argumento de la película. John Halloran (Peter Read) y su esposa Louise (Luana Anders) se trasladan a la casa familiar de los Halloran, un castillo en los parajes irlandeses, donde tendrá lugar un curioso ritual, conmemorar la muerte de la pequeña Kathleen Halloran fallecida siete años atrás al ahogarse en el lago. John y Louise no parece un matrimonio dichoso. Las primeras imágenes nos muestran a un hombre asqueado por su esposa, mientras que esta vive sumida en una constante preocupación por la herencia familiar.
Por su parte, Lady Halloran (Eithne Dunn) no ve con buenos ojos a su nuera americana. Además, desde que murió la pequeña Kathleen se encuentra muy débil de salud y vive empecinada en donar todo su dinero a obras benéficas, dejando a John y sus otros dos hermanos, Richard y Billy sin nada. Pero Louise no está dispuesta a que eso ocurra. Tras fallecer su marido, algo que ella mantendrá en secreto, intenta granjearse la simpatía de su suegra, incitándola a pensar que el fantasma de su hija pequeña ronda por los pasillos del castillo en busca de ayuda, pero se irán sucediendo una serie de extraños acontecimientos y algunos personajes perderán la vida en manos de una sombra misteriosa más terrenal que otra cosa. La aparición del médico de la familia (Patrick Magee), que se interesa por los hechos que se están sucediendo en el castillo, resultará ser el detective que resuelve este caso lleno de secretos familiares.
Demencia 13 cuenta con un argumento al que yo no calificaría de terror, al menos en estos tiempos, sino más bien de intriga y suspense. Todo muy liviano. Los pilares sobre los que se alza la trama son los más antiguos y los más recurrentes, pues el dinero saca el lado más malvado de todo ser humano y prueba de ello es el comportamiento de Louise.
Las interpretaciones no alcazan niveles de renombre. No tengo mucho conocimiento previo de los actores y ninguno de ellos me han impactado lo suficiente como para indagar más sobre sus trabajos. Lo que sí me gustaría destacar en la oscuridad con la que la película está rodada. Me ha recordado mucho a esas escenas llenas de sombras más que de luces que aparecen en los cuentos victorianos, un poco a lo Henry James en Otra vuelta de tuerca. Pero si hay que hablar de referencias, la sombra de Alfred Hitchcock se intuye en algunas escenas. Un asesinato a orillas del lago recuerda muchísimo a la muerte de Marion en Psicosis rodada algunos años antes.
En definitiva, Demencia 13 es una película de entretenimiento somero que además cuenta con un final previsible. Algunos podrán pensar que no se le puede pedir más a una película del año 63 pero tengamos en cuenta que el gran Hichtcock ya hacía maravillas por entonces. Por lo tanto, más que para cubrir una hora y cuarto de aburrimiento, recomendaría este largometraje a todas aquellas personas que les guste mucho el cine y sientan curiosidad por conocer cómo fueron los primeros trabajos de un cineasta que luego hizo películas tan reconocidas como El padrino, Apocalypse Now o Dracula de Bram Stoker.
Trailer (en inglés):