Hace justo un año, comenzaba el balance del mes de marzo con este párrafo:
¡Qué diferente resulta todo! Mañana deberíamos estrenar Semana Santa también. No me puedo creer que estemos viviendo esto, que tengamos que estar alejados de los nuestros, madres y padres aislados en sus propias viviendas, sin poder abrazar a sus hijos, que nos asomemos a las noticias con tanto pánico, descubriendo que el número de contagios aumenta y, lo que es peor, el número de fallecidos. No quiero centrar esta entrada en el horror que estamos viviendo pero no dejo de hacerme preguntas, las mismas que muchos se hacen. ¿Acaso son reales las cifras que nos han llegado desde China? Y si todo empezó allí, ¿cómo es que hay ciudades y países de alrededor que se han visto afectadas pero sin tanta virulencia? No lo entiendo bien. Y mientras tanto, sanitarios, policías, protección civil, transportistas, auxiliares de geriatría, personal de supermercados y tiendas de alimentación, empleados de servicios esenciales, y tantos otros están ahí, dándolo todo, que no es que merezcan un aplauso sino un monumento. A los demás, solo nos queda hacer lo más fácil, quedarnos en casa, algo que un sector de la población, no demasiado pequeño, parece que le cuesta entender.
En fin, amparemos en la literatura. Vengo con el repaso a marzo.
"No puedo más que iniciar este repaso con una sonrisa. Leyendo el resumen de marzo del año pasado, comentaba que soy una persona cíclica y que por estas fechas siempre se me acumula el trabajo y llego a este post bastante tarde. Me alegra saber que sigo siendo fiel a mí misma y que, de nuevo, llego al resumen del mes con el mismo retraso que me ha caracterizado otras veces. Se da además la circunstancia que mañana estrenamos Semana Santa. Después de unos días en los que el tiempo ha estado bastante inestable, parece que vamos a poder respirar tranquilos y como me conozco, sé que voy a estar muy desaparecida esos días y que después vendrá la Feria y esto es un no acabar, así que mejor hago repaso hoy y me quedo tranquila. ¿Empezamos?"
¡Qué diferente resulta todo! Mañana deberíamos estrenar Semana Santa también. No me puedo creer que estemos viviendo esto, que tengamos que estar alejados de los nuestros, madres y padres aislados en sus propias viviendas, sin poder abrazar a sus hijos, que nos asomemos a las noticias con tanto pánico, descubriendo que el número de contagios aumenta y, lo que es peor, el número de fallecidos. No quiero centrar esta entrada en el horror que estamos viviendo pero no dejo de hacerme preguntas, las mismas que muchos se hacen. ¿Acaso son reales las cifras que nos han llegado desde China? Y si todo empezó allí, ¿cómo es que hay ciudades y países de alrededor que se han visto afectadas pero sin tanta virulencia? No lo entiendo bien. Y mientras tanto, sanitarios, policías, protección civil, transportistas, auxiliares de geriatría, personal de supermercados y tiendas de alimentación, empleados de servicios esenciales, y tantos otros están ahí, dándolo todo, que no es que merezcan un aplauso sino un monumento. A los demás, solo nos queda hacer lo más fácil, quedarnos en casa, algo que un sector de la población, no demasiado pequeño, parece que le cuesta entender.
En fin, amparemos en la literatura. Vengo con el repaso a marzo.
[Para conocer la sinopsis de los libros expuestos
solo tienes que clicar en cada título o en los enlaces a las reseñas]
Los comprados
Estar confinado es lo que tiene, que no puedes salir a la calle y, encima, las librerías están cerradas. Sin embargo, antes de que todo cerrara, me compré Carmende Prosper Mérimée y maravillosamente ilustrado por Benjamin Lacombe (Edelvives).El autor francés vino a Sevilla, pero de eso os hablaré en los próximos días.
Y claro, el confinamiento disminuye el flujo de todo, también de la entrada de libros en casa. Sin embargo, antes de que se decretara el Estado de alarma, aparecieron por casa unas cuantas joyas.
El Centro Andaluz de las Letras había organizado el pasado 16 de marzo, la presentación de la nueva novela de Eduardo Mendicutti, titulada Para que vuelvas hoy (Tusquets Editores) en la Biblioteca Infanta Elena. Sin embargo, se tuvo que suspender por motivos obvios.
Para las entrevistas llegaron a casa unas cuantas novelas sumamente atractivas. Por un lado, Algo va mal de Fermín Bocos (Destino). A aquel encuentro sí dio lugar pero estábamos justo en el límite. Tanto la entrevista como la reseña, ya las tenéis en el blog. Os dejo los enlaces más abajo.
Y Julia retó a los dioses de Santiago Posteguillo (Planeta) es la secuela de Yo, Julia, novela con la que el autor ganó el Premio Planeta en 2018. Posteguillo tenía previsto venir a Sevilla para la gira de promoción, pero la inminente declaración de la alerta sanitaria impidió su desplazamiento. Aún así, pudimos conversar por teléfono y será una entrevista que publicaré en breve.
Luis Zueco es un autor al que le tengo muchas ganas. Acaba de publicar El mercader de libros (Ediciones B). Entiendo que su intención era visitar Sevilla para la promoción, pero seguramente ha sido un encuentro que se ha quedado en el aire. Esperemos que, cuando todo esto pase, pueda retomar su agenda.
Sarah Lark nos hace regresar a Nueva Zelanda con su nueva novela, El secreto de la casa del río, publicada por Ediciones B. La he terminado hace muy pocos días y creo que publicaré la reseña pronto. Ojo, que anuncio sorteo, aunque será un poquito especial.
En marzo acudí a la presentación de El maestro de la Mano Negra de Carlos Algora (Algaida). Os dejo el enlace a la crónica del acto más abajo.
Y por último, pero no menos importante, Luis Miguel Morales me hizo llegar su nuevo volumen de relatos, Cuando nacen los nombre (Libros Indie). Espero poder leerla pronto.
Los ganadosEl Centro Andaluz de las Letras había organizado el pasado 16 de marzo, la presentación de la nueva novela de Eduardo Mendicutti, titulada Para que vuelvas hoy (Tusquets Editores) en la Biblioteca Infanta Elena. Sin embargo, se tuvo que suspender por motivos obvios.
Para las entrevistas llegaron a casa unas cuantas novelas sumamente atractivas. Por un lado, Algo va mal de Fermín Bocos (Destino). A aquel encuentro sí dio lugar pero estábamos justo en el límite. Tanto la entrevista como la reseña, ya las tenéis en el blog. Os dejo los enlaces más abajo.
Y Julia retó a los dioses de Santiago Posteguillo (Planeta) es la secuela de Yo, Julia, novela con la que el autor ganó el Premio Planeta en 2018. Posteguillo tenía previsto venir a Sevilla para la gira de promoción, pero la inminente declaración de la alerta sanitaria impidió su desplazamiento. Aún así, pudimos conversar por teléfono y será una entrevista que publicaré en breve.
Luis Zueco es un autor al que le tengo muchas ganas. Acaba de publicar El mercader de libros (Ediciones B). Entiendo que su intención era visitar Sevilla para la promoción, pero seguramente ha sido un encuentro que se ha quedado en el aire. Esperemos que, cuando todo esto pase, pueda retomar su agenda.
Sarah Lark nos hace regresar a Nueva Zelanda con su nueva novela, El secreto de la casa del río, publicada por Ediciones B. La he terminado hace muy pocos días y creo que publicaré la reseña pronto. Ojo, que anuncio sorteo, aunque será un poquito especial.
Y por último, pero no menos importante, Luis Miguel Morales me hizo llegar su nuevo volumen de relatos, Cuando nacen los nombre (Libros Indie). Espero poder leerla pronto.
Pues en este confinamiento, he resultado agraciada en dos sorteos. En el blog Bookeando con Mª Ángeles un ejemplar de Aquella vez en Berlín de María José Moreno y en el blog De lector a lector, gané Morder la manzana de Leticia Dolera. Pero serán libros que llegarán a casa cuando todo esto acabe. Será entonces cuando os lo enseñe.
Las lecturas y el cine
Resulta curioso pero, ahora que tengo más tiempo, menos leo. Pensé que estos días de reclusión iban a ser lo que necesitaba para descansar y leer todo lo que quisiera. Sin embargo, no soy capaz de concentrarme. Me alteran muchísimo las noticias y me asusta lo que pueda pasar (y lo que está pasando). En mi entorno familiar hay personas que son grupo de riesgo y no dejo de estar constantemente preocupada. Pero me obligo a leer y procuro no bajar el ritmo del blog, al menos, de momento.
Las lecturas del mes de marzo -algunas ya reseñadas- fueron las siguientes:
- Algo va mal de Fermín Bosco.
- La chica a la que no supiste amar de Marta Robles, cuya reseña verá la luz la semana próxima.
- El secreto de la casa del río de Sarah Lark.
- Terror Book. El libro maldito de Iván Tapia y Miquel Coll.
- Los colores olvidados y otros relatos ilustrados de Silvia G. Guirado.
- Mecano de Javier Adrados.
- Sábado, Domingo de Ray Loriga.
Las lecturas del mes de marzo -algunas ya reseñadas- fueron las siguientes:
- Algo va mal de Fermín Bosco.
- La chica a la que no supiste amar de Marta Robles, cuya reseña verá la luz la semana próxima.
- El secreto de la casa del río de Sarah Lark.
- Terror Book. El libro maldito de Iván Tapia y Miquel Coll.
- Los colores olvidados y otros relatos ilustrados de Silvia G. Guirado.
- Mecano de Javier Adrados.
- Sábado, Domingo de Ray Loriga.
En cuanto a las entrevistas, estas fueron las que publiqué:
- Sergio Amado por Ámame, por favor.
- Esteban González Pons por Ellas.
- Fernando Benzo por Nunca fuimos héroes.
- Fermín Bocos por Algo va mal.
Y os hablé de la presentación de La madre de Frankenstein de Almudena Grandes, y de la presentación de El maestro de la Mano Negra de Carlos Algora.
- Sergio Amado por Ámame, por favor.
- Esteban González Pons por Ellas.
- Fernando Benzo por Nunca fuimos héroes.
- Fermín Bocos por Algo va mal.
Y os hablé de la presentación de La madre de Frankenstein de Almudena Grandes, y de la presentación de El maestro de la Mano Negra de Carlos Algora.
¿Y qué decir del cine? Os hablé sobre La trinchera infinita. El protagonista estuvo encerrado treinta años. Nosotros llevamos unas cuantas semanas y hay gente que se salta la cuarentena porque él lo vale.
Dado que los niños están en casa, también publiqué mis impresiones sobre una película de animación, muy curiosa, La rebelión de los cuentos.
Puñales por la espalda no me gustó tanto como esperaba. Un homenaje a las películas de suspense que no conquistó.
Sin embargo, Los dos papas me encantó.
Dado que los niños están en casa, también publiqué mis impresiones sobre una película de animación, muy curiosa, La rebelión de los cuentos.
Puñales por la espalda no me gustó tanto como esperaba. Un homenaje a las películas de suspense que no conquistó.
Sin embargo, Los dos papas me encantó.
¿Y qué tal está siendo abril?
No tan luminoso como debería pero a todos nos falta luz, ¿verdad? Deseo que todos estéis bien, al igual que vuestras familias y que este horror que nos ha tocado vivir desaparezca lo antes posible.