Autora
Victoria Álvarez es una joven escritora salmantina, que ya tiene en su haber distintos premios literarios, entre ellos el Torrente Ballester. Es historiadora del arte y especializada en literatura del siglo XIX. En 2011 publicó Hojas de dedalera, seguido de Las Eternas en 2012, dos novelas que han tenido gran acogida por parte de los lectores. Su obra hasta ahora ha sido traducida al italiano y al alemán.
Érase una vez Irlanda...
Corren los primeros días de enero de 1903 y el profesor Alexander Quills, un hombre sabio y triste, vuelve a su casa de Oxford después de asistir a unas conferencias en Londres; Oliver Saunders, joven y tímido, mientras tanto, trabaja en su pequeño cuarto de Balliol College, rodeado de diccionarios y novelas góticas, y Liones Lennox, amante de la buena vida y de las faldas ligeras, está en Egipto, a punto de profanar la tumba de una princesa para llevarse una joya de inestimable valor.
Poco tienen en común los tres amigos, excepto el cariño que los une y el interés por las nuevas ciencias que exploran el mundo del más allá. Muy pronto sus ganas de saber los llevarán a Irlanda, una tierra plagada de leyendas, donde las piedras tienen una historia que contar y el sonido de la lluvia se confunde con el llanto de unas mujeres que cuidaron de sus seres queridos incluso más allá de la muerte.
Victoria Álvarez es salmantina y no pudo elegir mejores estudios para la ciudad en la que reside. Licenciada en Historia del Arte en 2007, actualmente compagina el doctorado con la escritura. Sorprende su juventud y que ya tenga en su haber tres novelas publicadas. Hoy nos habla de la última, Tu nombre después de la lluvia.
En un incomparable marco nos adentramos por tierras irlandesas para descubrir leyendas y misterios que los tres protagonistas de esta novela tendrán que resolver. Un argumento que transcurre en tres escenarios maravillosos, Egipto, Oxford e Irlanda, siendo este el último el de mayor peso, y en la que encontraremos, como la propia autora dice en su blog «misterios, secretos familiares, castillos, amores, muerte y lluvia, mucha lluvia,...».
Esto es lo que nos contó sobre su nueva publicación.
Marisa G.- Victoria, encantada de conocerte y de charlar contigo.
Victoria A.- Gracias a vosotros por venir.
M.G.- Lo primero que llama la atención es tu juventud cuando resulta que ya tienes tres novelas publicadas. De hecho incluso has llegado a ganar un Torrente Ballester.
V.A.- Sí, pero no es el Torrente Ballester «grande». El que yo gané era para cuentos. Fue el primer premio literario que me concedieron con 15 años y para mí fue muy importante. Por entonces, yo ya escribía pero nadie, excepto mis padres y algunos amigos, habían leído mis escritos. Fue muy emotivo porque hicieron una entrega de premios y a mí me lo dio la viuda de Torrente Ballester. La verdad es que fue muy emocionante.
M.G.- Tu nombre después de la lluvia es tu tercera novela. Ya en el 2011 publicaste Hojas de dedalera y en el 2012 Las Eternas. Ambas con Versátil Editores. Ahora firmas con Lumen.
V.A.- A mí siempre me gustó Lumen y siempre he seguido sus publicaciones. Para mí publicar con un sello de Random era algo como imposible pero todo sucedió de casualidad. Una librera de Barcelona le recomendó Hojas de dedalera a Silvia Querini, la editora de Lumen, y le gustó. Ella contactó conmigo por facebook. Nos conocimos en San Jordi, charlamos y me encantó. Por entonces, este libro no estaba escrito, así que cuando lo acabé, se lo envié y a las dos semanas ya me dijo que sí.
M.G.- Afortunada casualidad porque publicar con Lumen no es cualquier cosa. Tienen una línea editorial muy buena.
V.A.- Y un catálogo impresionante que a veces intimida. En cuanto a prestigio, dudo que pueda alcanzar algo más que eso. Estar al lado de Silvia Querini es impresionante. Me están tratando fenomenal y estoy muy contenta.
M.G.- Yo no he leído tus dos novelas anteriores pero me he estado informando. He visto que son muchos los blogs juveniles que las han reseñado. ¿Tú las consideras juveniles?
V.A.- No, en absoluto. Para mí es literatura de adultos pero sospecho que como soy joven, los lectores tienden a hacer esa asimilación. En cualquier caso, esta última es totalmente para adultos.
M.G.- Eso te iba a decir. Para mí Tu nombre después de la lluvia es una novela de adultos. Quizás como en el argumento hay algo de fantasía se puede llegar a pensar que es literatura para jóvenes.
V.A.- Yo nunca escribo pensando si lo hago para jóvenes o adultos. Yo escribo lo que a mí me apetece leer. Es verdad que cuando escribí Hojas de dedalera era más joven y lo mismo se nota que mis inquietudes eran más juveniles que ahora. Puede ser.
M.G.- Has evolucionado entonces. De hecho creo que esta mañana he leído una reseña de una chica que había leído tus novelas anteriores y ella comentaba que se notaba una evolución.
V.A.- ¿La de Rusta?
M.G.- Creo que sí. Creo que era ella la que hablaba de ese cambio que se aprecia en tus novelas.
V.A.- Yo creo que sí, lo que pasa es que a mí me cuesta verlo porque estoy dentro de la novela. De todos modos, pienso que sí he aprendido mucho sobre el tema del ritmo. Yo leo mucha novela del siglo XIX y todas suelen tener un ritmo bastante lento. Reconozco que en Hojas de dedalera el ritmo era así y chicas que no están acostumbradas a leer clásicos me lo comentaron. Pero de todo se aprende. Las críticas cuando son constructivas me parecen fenomenal. La relación con blogueros me ha hecho darme cuenta de cosas que yo apreciaba porque, al estar encima de mi obra, no lo veo con perspectiva.
M.G.- Las primeras páginas del libro citan a Wilkie Collins. ¿Es un referente para ti?
V.A.- Sí. Me gusta mucho el siglo XIX y la literatura inglesa decimonónica. Recuerdo que leí La dama de blanco de Wilkie Collins cuando tenía 13 o 14 años y me gustó mucho. En mis libros me gusta meter muchos guiños a los clásicos, a Oscar Wilde por ejemplo, a las Brontë, a Jane Austen,... En este caso, hay un homenaje a La dama de blanco.
M.G.- Para homenaje, el que también le haces al folclore irlandés a través de una figura mitológica que se llama banshee. Es el centro de la investigación que llevan a cabo los protagonistas de tu novela. ¿Cuéntanos un poco sobre esa leyenda?
V.A.- La banshee es un tipo de espíritu que, según el folclore irlandés, está vinculado a un gran clan. Cada uno tiene su propio banshee. Se supone que le sirven como emisarios de la muerte. En el momento en el que un miembro del clan va a fallecer, la banshee lo anuncia con sus sollozos. Yo creo que, en caso de ser verdad, más que anunciar la muerte de alguien lo que ocurría es que se morían tan solo por escucharla.
Esta figura la conocí gracias a Harry Potter. Cuando tenía 15 años o así, leía estos libros y en el tercero se habla de las banshee. No sabía lo que eran y mis padres me regalaron entonces un libro sobre criaturas aparecidas en Harry Potter y hablaban sobre ellas. Luego empecé a investigar y con internet me enteré de todo. A mí siempre me han gustado mucho las novelas fantásticas y creo que esta figura encajaba muy bien en una historia tipo Poe, con una temática gótica.
M.G.- Una figura que apenas se ha tratado en la literatura, ¿no?
V.A.- En el siglo XIX sí, pero sobre todo en Inglaterra por la unión que tenía con Irlanda. Sin embargo, fuera de allí nada.
M.G.- Muy curioso. Además Irlanda se presta mucho a este tipo de historias, con tantas leyendas...
V.A.- Da mucho juego, sí. A mí lo que me alucina es que siguen creyendo en estas cosas. Para los irlandeses de hoy , las banshee, los leprechaun,... siguen formando parte de sus vidas.
M.G.- Un poco como ocurre en los pueblos pequeñitos y recónditos de Asturias o Galicia con los tragus y demás ¿no? Son tradiciones muy arraigadas.
V.A.- Exacto. De hecho, cuando estuve investigando para este tema, me hizo gracia comprobar que muchos irlandeses que habían emigrado por aquella hambruna de la patata y que se marcharon a Estados Unidos, creen que las banshee se marcharon también con ellos y que ahora «residen» allí. (Risas)
M.G.- Ya te digo. Y en cuanto a los protagonistas, si no me equivoco, en tus anteriores novelas eran todas femeninos o bien una pareja de chico y chica. En este caso has construido el argumento en torno a tres hombres. Un cambio radical.
V.A.- Para mí era un reto. Siempre he pensado que la voz masculina se me daba muy mal pero me lo propuse así. De todos modos, en esta novela, las mujeres también tienen una gran importancia como detonante de todo lo que sucede. Aparecen mujeres muy buenas pero también muy malas y alrededor de ellas giran todos los descubrimientos. Para que el foco caiga sobre las mujeres, por contraste los protagonistas tenían que ser hombres. También decidí que fueran tres protagonistas porque se enriquecía mucho la novela.
M.G.- Tú sabes que el tres es un número mágico en la cultura celta, bueno y en otras culturas y religiones. No sé si lo hiciste aposta.
V.A.- No, en realidad no, pero pensé que tres personalidades distintas enriquecía mucho el argumento. Son muy diferentes. Alexander es el científico, serio y frío, en cambio Lionel es mucho más apasionado, da un juego tremendo, mientras que Oliver es el más sentimental. Por lo que me han dicho ha gustado mucho cómo han interactuado, como un grupo de amigos actual, cada uno con su rol asignado.
M.G.- ¿Y cuál te ha costado más? ¿Cuál es el más complejo? ¿Alexander?
V.A.- No sabría decirte bien, sí quizás Alexander. Es el que tiene un pasado más tortuoso. Lionel no me ha costado nada en absoluto. Es el personaje que menos se parece a mí porque es un caradura y a mí la gente así no me gusta nada.
M.G.- Es muy simpático...
V.A.- Sí, es muy simpático pero al principio le cogí manía porque era un viva la Virgen pero luego acepté que el personaje es así y no tengo que pretender que a mí me caiga bien en la vida real. En cambio Oliver es el que más se parece a mí.
M.G.- Por su fantasía y su romanticismo...
V.A.- Sí y ese diccionario que está escribiendo que es como mi tesis que me tiene harta.
M.G.- ¿Síii? (Risas)
V.A.- Sí, sí...
M.G.- Y en cuanto a los femeninos. No sé si sientes afinidad por alguno.
V.A.- El que siento más mío es la señorita Stirling, un secundario que sale poco pero que en el epílogo da mucho que pensar...
M.G.- Y otro personaje femenino que a mí me ha encantado es Veronica que siempre va a acompañada por su cuervo, un detalle muy gótico. Pero a la mitad de la novela desaparece y ya no asoma más.
V.A.- Sí. Mira en Lumen me comentaron que el personaje de August aporta poco en comparación con los otros tres y Lumen pensó que era más interesante que Veronica viajara a Irlanda con los protagonistas. Ahora creo que ellos tenían razón pero si se llevaban a Veronica, había ciertos acontecimientos que no podían tener lugar, todo lo relativo a Jemima y a Lionel y claro, Jemima es un detonante importante.
M.G.- Sí, claro por el tema de la venganza y demás.
V.A.- Eso es. Parece una tontería pero cada hilo, en el momento que lo quitas o lo mueves, se descoloca todo el tapiz.
M.G.- Creo que conoces los escenarios que salen en la novela. Viajaste de pequeña a Egipto, conoces Oxford,...
V.A.- A Irlanda no he viajado. Lo tengo pendiente.
M.G.- El pueblo irlandés de Kilcurling no existe, ¿verdad?
V.A.- No, no, es invención. Yo suelo trabajar con escenario reales. Todo lo que aparece en la novela sobre Oxford, la casa donde vive Alexander con su sobrina es real, pero en el caso del pueblo irlandés no encontraba nada que se ajustara. Necesitaba un castillo sobre un acantilado, que hubiera un cementerio al pie del castillo, un pub enfrente,... Así que lo que hice fue documentarme, buscar imágenes, fondos documentales de la época, cómo vestía la gente, cómo eran las casas de los pueblos,... y a partir de ahí pues construí mi propio pueblo.
M.G.- Y para documentarte para la novela, en los Agradecimientos figura una lista de libros que te has tenido que leer, creo que todos en inglés...
V.A.- Sí, me los pidió un amigo. Ahora mismo en internet está todo. Tú buscas información sobre lo que sea y lo encuentras. Lo que pasa es que yo creo que para un libro es mucho mejor investigar y documentarse con libros.
M.G.- Los que han leído tus novelas dicen que en este libro has hecho algún guiño a tus libros anteriores.
V.A.- A mí es que me encanta que los autores, como Neil Gaiman, hagan eso. Él crea como un universo común a todos sus libros y a mí me gustaría un día poder hacer algo así. A ver no creo que me lleve toda la vida escribiendo con la misma ambientación aunque sí pienso que hay que escribir sobre lo que conoces realmente, porque queda más auténtico. Mientras escriba con esta ambientación, sí me gustaría hacer cameos de personajes que entran y salen. En este caso, lo que sucede es que la medium, Annabel Lovelace, que le envía la carta con la información sobre la banshee es la protagonista de Hojas de dedalera.
M.G.- Bueno, ¿y qué me dices de las frases en gaélico? Lo explicas en los Agradecimientos pero yo llegué a pensar que tú sabías hablarlo o, al menos, escribirlo.
V.A.- No, no. Para eso me ayudó Debbie McShane. Es la amiga de la hermana de mi novio. El año pasado estuve en París buscando información para la tesis doctoral y casualmente mi cuñada estaba allí de Erasmus. Le comenté por encima el tema del libro y ella había estado unos meses en Dublín estudiando inglés y me puso en contacto con esta chica.
Yo había intentado hacer la traducción por mi cuenta pero aquello no sonaba bien. A Debbie le mandé la frase en inglés y mi traducción al gaélico y ella, muy amablemente, me dijo que estaba todo mal. Me vino genial su ayuda. Y con las frases en egipcio también me han ayudado.
M.G.- ¿Cuánto tiempo te llevó escribir este libro?
V.A.- Yo es que tardo mucho en documentarme y además me frena mucho la tesis. No puedo dedicarme a jornada completa a escribir. Esta novela la empecé el 16 de diciembre de 2012 y la terminé a finales de marzo. Cuatro meses en total.
M.G.- ¡¡Muy poco tiempo!!
V.A.- Mis amigos escritores se sorprenden porque escribo rápido pero es que yo me llevo documentándome un año antes y mientras lo hago voy apuntando en un cuaderno lo que pasa capítulo a capítulo. No soy nada espontánea a la hora de escribir. Puede parecer poco creativo y poco romántico pero es que la parte de creación la tengo hecha antes de ponerme a escribir y una vez que me pongo, sé lo que va a ocurrir en cada capítulo. Sospecho que esto no es lo mejor pero soy muy insegura todavía.
M.G.- Victoria, pues no tengo más preguntas que hacerte. La verdad es que ha sido un placer hablar contigo sobre tu novela. Te deseo muchísima suerte.
V.A.- No, no,... gracias a vosotros por el interés.
V.A.- No, no,... gracias a vosotros por el interés.
Y hasta aquí la entrevista que nos concedió Victoria Álvarez. Bueno, en realidad, hubo una pregunta más pero esa mejor la dejamos en el aire...
Como decía al principio, Tu nombre después de la lluvia es una novela que recoge parte del folclore irlandés representado en este caso por la figura mitológica de las banshee. La reseña la publicaré en los próximos días pero mientras tanto, si os interesa el tema y queréis leer más, podéis visitar el blog de Victoria.
Como decía al principio, Tu nombre después de la lluvia es una novela que recoge parte del folclore irlandés representado en este caso por la figura mitológica de las banshee. La reseña la publicaré en los próximos días pero mientras tanto, si os interesa el tema y queréis leer más, podéis visitar el blog de Victoria.